El símil que el guionista Billy Wilder daba de su trabajo con Charles Bracket no se sale un ápice del campo de la pirotecnia: “Nos peleábamos mucho. Bracket y yo éramos como una caja de cerillas. Rascábamos sin parar hasta que alguna se encendía”. Y añade, quién sabe si para ilustrar cómo era un día bueno: “A veces llegaba a tirarme una guía telefónica”.
-
Como pez en las redes
Historial de entradas
Entradas populares